QUINTANILLA DE TRES BARRIOS

1 de noviembre, 2017

Rememorando la tradición de la Machorra

  

 

 

Retrospectivas de la Machorra, año 1986                           Fotos: Javier Molina

 

En la noche de ayer tuvo lugar la rememoración de una de las tradiciones más arraigadas del calendario costumbrista-tradicional del pueblo: Correr la machorra. Una costumbre que se ha venido mantentendo mientras las circunstancias lo han permitido porque la voluntad no siempre es suficiente para ejecutar un evento. La sensibilidad de algunos sectores de la sociedad en la defensa de los animales ha ocasionado que algunas manifestariones populares se hayan visto relegadas al desuso y en muchos casos a la pérdida del folklore identitario de los pueblos. 

La tradición de la machorra se ha visto afectada por esta causa a pesar de que en los últimos años el trato al animal siempre ha sido correcto, sin que para nada asomara atisbo alguno de maltrato. No hay nada pues que impidiera llevarse a cabo, pero el temor a exponerse a una multa por parte del organismo pertinente, como ha ocurrido con las matanzas del cerdo en algunos pueblos, ha motivado la renuncia. 

Toda la parafernalia que envolvía la tradición de la machorra iba bastante más lejos de la suelta del animal por las calles. Algo que hace muchos años se perdió por el camino. El protagonismo de los mozos en esta jornada de tradición y difuntos se perdió, comenzaba con este acto y continuaba hasta el día de las ánimales. Una jornada de convivencia en la que la cuadrilla de mozos tomaba el protagonismo y se implicaba en manifestar el duelo casa por casa cantando y rezando a la puerta de cada una de ellas. Y por supuesto dando cuenta del animal en las comidas que se celebraban para la ocasión. (Ampliar información en el apartado Conoce Quintanilla-Tradiciones-La machorra). 

Pero la noche de ayer tuvo el encuentro con la efemérides de la conmemoración. La cena que se celebró y la comida del siguiente día, organizadas por la Peña El Coyote, es un manifiesto para ensalzar una tradición que perdura a lo largo de los tiempos y sirve como acicate para unir a la gente en la mesa y compartir una velada de hermandad, de amistad, de buen ambiente y de crear un espacio de convivencia en el que por encima de todo destaque la predisposición a la participación para mantener los lazos de pertenencia al pueblo y a sus costumbres. 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Fotos: Lydia Carro, Mila Carro y Joaquín Liaño

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22 de octubre, 2017

En recuerdo de la fiesta de antaño

 

 

 

 

 

 

 

Fotos: Vicente García

Coincidiendo con la antigua fiesta principal del pueblo, 20 y 21 de octubre, se celebró en la noche de ayer una cena de hermandad a la que asistieron un nutrido grupo de comensales, en torno a los 50, que se dieron cita para degustar una parrillada de pescado y suplemento. El acto fue organizado por la Peña El Coyote. 

 

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20 de octubre, 2017

Archivo fotográfico del pueblo

 

                Fotografía de Máximo Peñalba que se casó con Juliana Aguilera

                 (hermana de Faustina Aguilera, mujer de Cipriano Lafuente),

                      matrimonio que marcharía a Argentina al inicio de 1900.

                Foto: Juan Carlos Solari (nieto de Máximo)

 

Buena parte de la identidad de un pueblo se refleja  en su fisonomía, ya sea personal o material. El proceso iniciado hace un par de años para realizar un archivo fotográfico del pueblo va tomando forma y contenido. La idea es recopilar todas aquellas fotografías que  por su significado puedan ser de un valor incalculable para dar a conocer a las futuras generaciones las gentes que lo poblaron, su etnología  o la peculiaridad de su entorno.

Sirve cualquier fotografía que posea un significado especial, ya sea de carácter personal, etnológico o arquitectónico. De lo que se trata es de revelar la personalidad del pueblo a través de sus gentes, de sus tradiciones, de sus costumbres, de sus edificios, de sus aperos y utensilios, de todas aquellas características en las que se pueda apreciar la peculiaridad del pueblo en épocas pasadas.

Tiene la misma consideración una fotografía personal o familiar que otra en la que se pueda contemplar cualquier  evento popular, tradicional o costumbrista.  Lo mismo sirven fotografías  en las que se puedan ver hábitos de la vida cotidiana o edificios que en la actualidad ya no son posible reconocer.

Entre las fotografías familiares suelen ser significativas aquellas del libro de matrimonio en las que aparecen las fotos de la pareja o las del grupo familiar, como las familias numerosas. 

Hasta el momento ae llevan recopiladas un número considerable de fotografías facilitadas por personas y familias que nos han hecho llegar recuerdos entrañables de sus gentes para conocimiento de los demás. Es de loar las que nos han llegado desde Argentina de gentes del pueblo que en su día emigraron a aquel continente, como las que nos ha hecho llegar el señor Juan Carlos Solari de sus abuelos y familia (ver apartado Háblanos-Libro de visitas).  Agradecemos profundamente esos gestos que esperamos sean seguidos por todos aquellos que disponen de material fotográfico para enriquecer parte de la historia del pueblo. Un testimonio que dignifica la voluntad de su gente. Se pretende que el fondo fotográfico, en cualquiera de sus apartados, pueda estar disponible para quienes tengan interés en contemplarlo.

Podéis hacer llegar las fotos facilitándolas en persona (se devolverán a la mayor brevedad posible), escaneándolas o fotografiándolas y enviarlas al correo electrónico: webmaster@quintanilladetresbarrios.com o a ltorre.es@telefonica.net . Deberéis indicar qué es, quién  o quiénes son las personas de la foto, el año aproximado en que está tomada, lugar, si es fuera del pueblo, y autor o nombre de la persona que facilita la foto para anotar los datos al pie de la misma.

 

Ánimo y nuestro agradecimiento a todos. 

 

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20 de octubre, 2017

Nueva imagen del Cerrillo

 

 

 

Aspecto que presenta la entrada del pueblo con la ubicación de los "pilones" de lagar.

Fotos: L. Torre

 

Poco a poco se va perfilando el espacio del "Cerrillo", de la entrada del pueblo. Se suele decir que la primera impresión es la que queda. Y en este caso la impresión de la imagen es la implantación in situ parte de lo que fue en su día: un espacio dedicado al vino.

Los más viejos del lugar recordamos que en el entorno se hallaban instaladas bodegas y lagares que dieron al pueblo esa peculiaridad singular que actualmente por circunstancias hidráulicas o por desidia de la gente han desaparecido.

Una de las pretensiones es devolver a este espacio parte de ese legado arrebatado. Todo aquello relacionado con una de las actividades agrarias de mayor raigambre en el pueblo: la vid. Un espacio etnológico que rememore lo que en su día fue una actividad importante en la labor cotidiana de su gente.

En esta zona se pretende llevar a cabo algunas ideas en consonancia con el lugar privilegiado que ocupa, espacio abierto de amplias panorámicas. Ubicar un panel explicativo de los parajes del término que se alcanza a divisar. Un balcón acogedor en el que tenga cavida la contemplación y el relax. 

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27 de septiembre, 2017

La vendimia en el pueblo vista por la prensa

 

 

 

 

 

 

 

 

La prensa soriana, a través del periódico Heraldo-Diario de Soria, se hizo eco de la recolección de la vid en el pueblo. Un extenso reportaje producido por la Bodega Gormaz en la que participaron, además de los titulares del viñedo y vendimiadores, técnicos de la propia bodega.

 

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4 de junio, 2017

Ruta ciclista por término del pueblo

 

          Cartel anunciador. Foto asociación                       

  

Este domingo 4 de junio se celebra la quinta Marcha en MTB en El Burgo de Osma dentro de la ‘Ruta del Nískalo’. La salida  será a las 9.30 horas de la plaza Mayor de la localidad con destino al mismo punto. El recorrido se ha modificado en esta nueva edición pasando por localidades como Alcubilla del Marqués, Quintanilla de Tres Barrios, Sotos del Burgo, Ucero, Valdelinares, Valdemaluque, Valdelubiel y Barcebalejo.

 

La llegada a las inmediaciones de la Atalaya desde Alcubilla del Marqués se producía en torno a las diez y media de la mañana. En una mañana que amenazaba lluvia, los ciclistas se desplazaron por la ruta prevista, marcada con anterioridad y ratificada por voluntarios del pueblo que les esperaban en diferentes puntos del recorrido.

 

En la marcha se dieron cita en torno a 400 participantes que hicieron una de las dos rutas programadas. La corta de 42 kilómetros o la larga de 68. 

 

La ruta en el término del pueblo comenzaba desde la entrada del camino de Alcubilla, Cañada Real y empalmar con el camino de Pedraja hasta la Ermita. Desde aquí tomarían la senda de la fuente hasta la majada de los bueyes. 

 

Empalmarían con el camino de El Burgo hasta el paraje de la Cuesta y cruzar la Cañada Real, próximo a las Chorreras, para entrar en el término de Osma.

 

 Agrupaciones de ciclistas participaron en esta quinta edicción de la "ruta del nískalo" que en esta ocasión los organizadores propusieron un diseño del recorrido diferente al de años anteriores. 

 

Algunas personas del pueblo se trasladaron hasta algún lugar del trayecto. 

 

 

                    Fotos:@Eve y Nines Carro

Agradecer a la organización el que la ruta discurriera por el término del pueblo. La bicicleta no estropea caminos o trayectos que quedan en un estado calamitoso, como ocurre con motos de trial o quads.  

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12 de marzo, 2017

El museo parroquial ya es realidad

   

Uno de los murales coronando la puerta de entrada de la iglesia

Tras un periodo de tiempo acometido en llevar a cabo la ubicación de los materiales, ha finalizado su acoplamiento y distribución en las dos alas/salas de los soportales de la iglesia. Han pasado algunos meses desde que se puso en marcha la obra debido a diversas circunstancias ajenas a nuestra voluntad. 

 

Imagen parcial de una de las salas

Ha merecido la pena rescatar los materiales y elementos religiosos recogidos en los trasteros de la iglesia para poder exponerlos y dar vistosidad a dos espacios cerrados a ambas partes del portal de entrada a la iglesia. 

 

Perspectiva frontal de la misma sala

En cada una de las salas se pueden ver los murales -popularmente "monumento"- que antiguamente se colocaban en la Semana Santa durante los días de dolor (jueves y viernes) tapando el retablo del altar mayor como señal de luto por la muerte de Cristo. 

 

Otro de los laterales de la sala

La distribución y el acoplamiento se han realizado en base al espacio disponible para poder captar en global los paneles de la mejor manera posible y conjuntar imágenes sobre la misma temática. 

 

Imagen de la otra sala, con la pila bautismal como elemento destacado

Esta sala se ha complementado con parte de los paneles o lienzos alusivos al Espíritu Santo, en forma de paloma, sobre la pila bautismal así como algunos elementos más recopilados.

 

Andas que otrora sirvieran para trasladar las imágenes

Fotos:@L.Torre 

En la zona central que separa ambas alas se colocaron también estas dos andas que permanecían entre el material inservible acumulado con el cual se ha completado el proceso de creación de este pequeño pero acogedor museo parroquial del pueblo.

La obra ha sido financiada con la aportación efectuada por la Asociación Torderón, así como también con la colaboración de algunos de sus socios y otras personas ajenas a la Asociación. A todos ellos hay que agradecerles que el pueblo pueda contar con otro espacio digno de reseñar para ser contemplado.

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12 de marzo, 2017 

Luces y sombras en el panorama del pueblo

  

Aspecto de una de las calles recién arregladas

 

De presencia, todo indica que el pueblo se encuentra en un estado emergente. Arreglos de las calles, colocación de barandas, ornamentos y algunos otros detalles han llevado paulatinamente al lavado de cara y al cambio de imagen. La percepción a primera vista es positiva por cuanto la metamorfosis que ha experimentado durante los últimos años hace pensar que está preparado para vivir en él de una manera digna, acorde con los tiempos modernos.  

"El pueblo está de muerte", manifestaba alguien al respecto. 

  

El casco urbano ha refulgido su presencia aunque haya sido a costa de eliminar la estampa, la imagen que siempre le ha caracterizado. No hemos querido o sabido dar continuidad a la típica construcción autóctona que ha predominado. En ningún sentido. Ni en las casas ni en el  resto de edificios típicos o singulares para declararlos BIC (bien de interés cultural) y darles un atractivo turístico, como han hecho otros pueblos de la zona que se han esforzado en mantenerlos.

 

Las casas del pueblo las hemos convertido en funcionales sin tener en cuenta los rasgos identificativos. Al resto de edificios, a los que ya no se les da ninguna utilidad, les hemos guillotinado dejándoles derrumbarse y dando una imagen esperpéntica al conjunto del casco urbano. Los edificios o se cuidan o se destruyen y se desescombran, no tienen porqué permanecer como ruinas arquitectónicas sin ninguna utilidad. Ello evidencia a sus propietarios y al trato o respeto que le dan al pueblo.

 

Las apenas media docena de almas que viven en él son la fiel imagen en la que lo hemos convertido. A buen seguro nos sentiremos orgullosos de la autoestima que decimos profesarle, pero la realidad es muy distinta:seremos la generación que pasará a la Historia de Quintanilla por haber sido capaces de despoblarlo con más de mil años a sus espaldas. Es cierto que la despoblación es el cáncer, el drama que asola la provincia. Pero hay pueblos de las mismas características que el nuestro que han buscado remedios o soluciones, o al menos lo han intentado, para no dejarlos morir. En el pueblo nunca nos ha preocupado semejante situación, ni siquiera nos ha removido la conciencia el intentar darle vida, buscar repobladores, como si el mayor de todos los problemas fuera una minucia.

Por lo general, tampoco nos prestamos a colaborar e implicarnos en hacer algo por él. Ahí radica y se demuestra el verdadero interés que sentimos por él. Cada cual, según las conveniencias, vemos en él objeto del deseo: disfrutar y pasarlo lo mejor posible. Y hasta la próxima. 

Ciertamente "en el pueblo se está de muerte", aunque ésta lo persiga a pasos agigantados. Nos hemos acostumbrado a ello. 

 

Texto y fotos: L. Torre

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26 de enero, 2017

Visita invernal a la Atalaya

 

Componentes del grupo excursionista San-Bur en la Atalaya    Foto: David Alonso

 

Dentro del proyecto "Conoce tus lindes" del grupo excursionista San Bur, un grupo de cuarenta y seis montañeros disfrutaron de una ruta invernal por la comarca de San Esteban de Gorma, según noticia recogida por Ana Hernando en el periódico Heraldo de Soria.

"Con el Cantar del Mio Cid como lema para muchas de sus rutas, el grupo de senderistas de San Esteban de Gormaz y el Burgo de Osma, San Bur, disfrutó este fin de semana (21/22) de uno de sus proyectos más sociales, la ruta educativa "Conoce tus lindes" con la que pretenden que los senderistas disfruten de la naturaleza más cercana a través de rutas por la zona.

Así en esta ocasión un total de cuarenta y seis sambureños demostraron una gran acogida por seguir las huellas cidianas en su camino hacia el destierro, recorriendo pedanías como Quintanilla de Tres Barrios, Pedraja de San Esteban, además de San Esteban de Gormaz y la pedanía burgense de Alcubilla del Marqués.

La actividad tuvo una gran acogida no sólo por parte de socios de San Bur, sino también de vecinos de la comarca que se sumaron a esta ruta de andar por casa, como la definen los organizadores, pero que "permite disfruta de nuestros parajes y pueblos más cercanos".

Con el frío, pero con un sol radiante que animó la marcha y siguiendo las huellas del poeta cidiano se completó una nueva etapa de programa Conoce tus lindes, que busca realizar una actividad senderista con atractivo gastronómico y deportivo".

Información recogida de Ana Hernando en Heraldo de Soria  

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